UNA HISTORIA INTERESANTE ME CONTÓ MI MADRE

LA GRAN TORMENTA

     "Septiembre de 1985"

Fue un día caluroso, despejado, demasiado tranquilo metereológicamente hablado.

Por la tarde, de la nada y de repente aparecieron remolinos de aire ascendiendo de forma circular, elevando hacia las nubes plásticos y demás materias, provocando el miedo a quienes lo vieron.

En la soga de mi bisabuela tendía la colada del día, la cual fue arrastrada en parte por el torbellino.

Ahí quedó la cosa a eso de las seis de la tarde. Pero llegó lo peor de aquella extraña tormenta a las diez de la noche, oscurecido el cielo, negra la noche, silenciosa, todos estaban ya para acostarse cuando un ruido atronador rasgó la noche, partió el cielo en pedazos, del cual salieron muchos colores: blanco, azul, rojo... y un viento feroz.

A mi bisabuela se le ocurrió mirar por la puerta. Al ir a abrirla el viento la empujó con fuerza, introduciendo dentro de la casa montones de hojas procedentes de distintos tipos de árboles.

Agua, mucha agua cayó durante bastante tiempo, más de la media noche.

Aquella tormenta arrancó cipreses, levanto tejados y destrozó el maíz todavía sin cosechar. Fue destructiva. Inundó bajos y muchos vecinos tuvieron que pasar los siguientes días en casa de familiares y amigos.

Aquello había sido un auténtico huracán.

                                             (Publica: Genoveva de 6º)